Finisterre

Finisterre y el actual parque de las islas atlánticas esconden bajo sus aguas una verdadera colección histórica de hundimientos navales.
Los barcos hundidos en torno a los tres archipiélagos conforman un auténtico cementerio naval y son parte de la memoria histórica de Galicia.
Los primeros naufragios de los que se tienen noticias en las Cíes datan del año 899, cuando una flota musulmana al mando de Ben Abdelhamid se dirigía al norte de la Península y fue sorprendida por una tempestad a la altura de la desembocadura del Miño.
El barco que sin duda tiene más fama es el Santo Cristo de Maracaibo, por la leyenda del tesoro que transportaba y que se supone se hundió con él en la batalla de Rande.
El parque impulsó una campaña arqueológica subacuática en el año 2007, para conocer la potencialidad de sus fondos y así poder protegerlos.
De aquellas inmersiones, se localizó en Cíes, el navío Rodas I, naufragio ocurrido a partir de mediados del siglo XIX, compuesto por elementos metálicos, también documentaron otro navío compuesto por piezas metálicas y un tercero formado por un motor de combustión.
El estudio también incluye la localización del H.S.M. Jupiter, un navío militar británico del siglo XVIII, descubierto en 1956, y no olvidemos el Prestige, que causó la peor marea negra de los últimos tiempos.
La mayoría de naufragios han sucedido en los alrededores del parque Islas Atlánticas, pero toda la costa Atlántica gallega tiene un historial similar.